domingo, 19 de octubre de 2008

... y que Dios reconozca a los suyos.

Llega esa temporada del año en que las editoriales ponen en las tiendas la edición anual de las distintas RVF, Gault Millau, Peñín, Guía Gourmets, etc. La que no está ya en las tiendas poco le falta. ¿Qué tipo de libros son? Lo sabeis: Guías. Perdón, quería decir "Guías".

El qué pretenden y son las guías es un tema complejo por la cantidad de intereses implicados. No niego que me parecen útiles como herramienta de búsqueda, como un repositorio de información con listados de vinos y bodegas. Nada más, sólo eso. Hay otras formas de obtener la información, pero puede resultar comprensible el que a alguien le apetezca tenerlo en este otro soporte.
El problema, a mi juicio, es la diferencia existente entre lo que ellas quieren ser y el cómo son percibidas por sus lectores y compradores. Hay usuarios que en su comienzo en este mundo del vino las compran como punto de partida, buscando un kilómetro cero desde el cual comenzar. Conceptos a aprender y unos vinos a beber que presuponen como básicos. Otros usuarios sencillamente las coleccionan. Otros buscan el que algún gurú (o varios) certifiquen su gusto, intentando que no exista demasiado diferencial entre el propio y el de estos. Otros usuarios intentan planificar sus compras y existencias de bodega en base a estas guías. Seguro que hay otro tipo de usuarios finales, si bien en este momento no se me ocurren.

Sabeis los que me leeis y conoceis que no suelo andarme con medias tintas en mis opiniones. Puedo estar equivocado, y de hecho suele estarlo en la mayoría de las ocasiones, pero para que así lo acepte me lo tienen que mostrar y demostrar. De modo que todo aquel que quiera hacerme ver otra forma de observar las guías le escucharé y leeré, pero que nadie intercale en sus palabras la frase "de gustos no hay nada escrito" ¿ok? Hay demasiados intereses creados entorno a las guías como para que acepte ese aserto tan reduccionista y no tan inocuo como parece pretender en primera lectura.

Las guías no son objetivas. Yo tampoco lo soy. La diferencia está en que ellos venden objetividad, si bien lo hacen por ausencia de afirmación de la misma; lo cual tiene su güasa teniendo en cuenta los intereses comerciales provenientes de la venta de las mismas, publicidad, exportaciones/importaciones, etc. A esto hay que añadir el efecto colateralmente bastardo de los puntos. En distintas partes de la cadena de montaje industrializante de los vinos hay elementos que utilizan los puntos otorgados por tal o cual gurú para incrementar el precio de los vinos. ¿Es esto correcto? Ni sí, ni no, es sólo cuestión de economía de mercado. Algo aséptico en un principio, pero teniendo en cuenta los anteriomente esbozados intereses económicos, pues permítame amable lector que observe el paisaje con desconfianza. Ceja arqueada, en la mano izquierda una copa de vino y en la derecha la navaja barbera. Por si acaso.

Después vienen los "¡válgame Dios!" cuando algunos usuarios ven que sus vinos preferidos no obtienen los puntos que ellos esperaban, distribuidores y vendedores observan que sus apuestas no obtienen la bendición de esos puntos y algunas bodegas tampoco obtienen los puntos y promoción que habrían esperado...¿Qué ocurre cuando se pierde el favor del emperador?

Quizá existan guías y escritores de idem que merezcan la pena, pero hay tantas cosas que leer y tanto vino que beber que no me merece la pena el esfuerzo, el tiempo y el dinero que habría que emplear en ello. Quiero, no obstante, explicitar que esta particular diatriba mia no va contra ninguna guía concreta, si no contra el concepto mismo que estas representan. Creo en lo más íntimo de mi, que si tuviera que comprar una guía de vino escogería 'Historia de la Belleza' de Umberto Eco. De este modo, y hasta que observe lo contrario, guías buenas: ninguna. Eliminemos todas de nuestras bibliotecas (quien las tenga) y que Dios reconozca a los suyos.

No sé que mecanismo mental hace que este tema me traiga a la memoria este vídeo.



Nota: La imagen correspondiente a la película 'Los Diez Mandamientos' proviene de
http://trouble.philadelphiaweekly.com/

8 comentarios:

Anónimo dijo...

(miriam)
Bueno, Jose L. has dado con un tema que siempre me ha parecido importante, y de que como suele pasar, cada vez que comento algo, resulta que estamos en la misma onda¡
suelo comprar y conseguir entre 3/4 guias anuales y a ser posible de tendencias contrarias. Si, has leido bien, además de modas en el vino, también hay antagonismos marcados en nuestro pais, sin ir más lejos...
Yo siempre leo todo lo que puedo, archivo lo relevante (si las guias coinciden en poner la máxima puntuación a los mismos vinos, y su precio supera los 60 euros, degraciadamente, suelen ser excepcionales) y de lo demás, desconfio, y cato para que no me digan lo que debo o no debo opinar, aunque a fin de cuentas, lo más importante, no es la opinión (que se abusa mucho, y a veces, sin fundamento )sino más bien, el CRITERIO, pero para eso, mejor apoyarse en la experiencia, y en catar como mínimo 200 vinos/año.
Si alguna vez coincidimos, ya te contaré más cosas. ok¡
saludos, majo¡ (miriam)

Olaf dijo...

Justo estaba preparando la entrada sobre el resumen de lo catado en la presentación de la guía Peñín. Mira, me has puesto un buen pie para enlazarlo todo. En lo que has dicho coincidimos.
Y añadiría una cosilla. Los comentarios de las guías son fruto de una cata. No se vosotros, pero yo el vino lo compro para beberlo principalmente comiendo o cenando en casa. ¿No pensais que un vino puede ser valorado de forma muy diferente en una u otra situación? De que me sirve un vino de tropecientos puntos, diseñado para impresionar en una cata si luego a la segunda copa ya estoy cansado de él. Creo que los que hacen las guías se olvidan por completo de este aspecto.
Miriam, sobre lo de "si las guias coinciden en poner la máxima puntuación a los mismos vinos, y su precio supera los 60 euros, degraciadamente, suelen ser excepcionales"... ahí no coincido mucho, probé alguna castaña importante de 98 puntos ahí en lo de Peñin, por la que no pagaría ni 5€! Ya contaré.
Saludos

Olaf

José Luis Giménez dijo...

Hola Miriam,
¿tendencias contrarias? Admito que no leo guías, si bien en alguna ocasión las hojeo (y ojeo) en algún centro comercial y no suelo apreciar grandes diferencias en los vinos que destacan o dejan de destacar.
¿Máxima puntuación a vinos por encima de 60 EUR? Bueno, lo curioso sería que se mojasen y, si fuera adecuado, ver qué vinos por encima de esos 60 EUR no merecen ni un bostezo...
Planteo estas cuestiones para continuar con el debate ein! no porque cuestione tus opiniones en absoluto. De modo que Miriam, sigue contándonos que te escucharemos y leeremos con atención.
Saludos,
Jose

José Luis Giménez dijo...

Cierto Olaf, ese punto argumental se me distrajo. Los vinos para catar, "de pasarela", me suponen una bastardización de la verdadera naturaleza del vino: El acompañarnos en la mesa.
Ayer bebí uno que de primera impresión no era gran cosa, sin embargo con comida daba verdaderamente de sí.
Por otro lado, en esa relación simbiótica entre puntos y dinero, ¿conoceis algún caso en el que se haya dado una opinión negativa sobre vinos de precio alto?
Como mucho algo he leido en la sección de cotilleos de rebaja de puntuación en algún vino por algún tira y afloja entre algún bodeguero y algún crítico (disculpad que no afine el tiro, que no es por no hacerlo, pero es que no recuerdo los nombres exactos), pero nada más allá de un cruce de egos.
Saludos,
Jose

Anónimo dijo...

(Miriam)
Hey Jose L. ¡ , voy a dejar que me tires de la lengua, y te contaré algunas cosas de vinos consagrados:
La 1º vez que caté el laureado TRASNOCHO,(hace casi dos años, en Madwine ) casi me muero en el intento, y me dije: que nariz tan rara y se ha pegado en las encias y no me deja encajar las mandibulas¡me pareció una bestia horripilante y no entendía las excelentes críticas..
LLego éste año a Gourmet, y me encuentro a un enólogo de la Bodega, que me ofrece toda la evolución, desde la maceración carbónica en el ERRE P., pasando por los Reservas, el mecionado Trasnocho, y hasta una prueba sin etiquetar del siguiente TRasnocho...¡ y cómo cambió el cuento¡
si bien es cierto que es un vino muy dificil, con el servicio adecuado (aireación durante horas ) puede ser tomado también con largo recorrido (sustituir en la sobremesa por destilados escoceses) hasta la noche, ¡y continuar al dia siguiente )pero llegué a la conclusión porque lo tomé cuando llevaba 2 dias abierto en el stand, y convenientemente acondicionado¡¡¡
Otro ejemplo riojano de nivelazo : el Aurus, también catado en condiciones similares en Iberwine, que algunos destrozan por desconocimiento a este autentico Mihura.

Otro ejemplo, porque nos acostumbramos a beber/catar vinos modernos, o simplemente tánicos y corpulentos, no parecemos apreciar vinos de Mallorca porque nos parecen "Flojitos", cuando la crítica se emocionó con AN, o con los autenticos, "manto negro", y summoll, de Macia Batle:
de éste último, decirte que es el único vino que al tomarlo con un rulo de queso de cabra con ensalada,ha cuadrado tanto, que me llegó a emocionar¡¡
pero seria dificil que tanta gente tan aficionada a la crianza en maderas nobles, compotas de frutos negros, estructuras´de edificio de hormigón, puedan disfrutar éste vino sencillo, más esbelto y delicado que potente, y con nariz mineral y posgusto ferroso que hizo maravillas con quesos, asadillo de pimientos rojos, chipirones en su tinta...
saludos by Miriam

José Luis Giménez dijo...

No observaría inconveniente en que para apreciar un vino convenientemente explicitarán "Instrucciones de uso" en la etiqueta. Pero estamos hablando de "flojos" y "corpulentos" como si alguna de ambas características fuera encomiabla. Desde mi punto de vista son ambas lamentables.
Estructura, equilibrio, dimensionalidad, textura. Sin gritos, sí a lo susurros. Sin chabacanerías, sí a la elegancia.
Sí al manifiesto Theise!

No termino de entender mucho si incluyes a Aurus y Trasnocho en vinos dignos de mención o no. Ya que en tu último párrafo pareces criticar un tipo de vinos de los que ambos parecen exponentes

Nota: No he probado ninguno de ellos.

Saludos,

Jose

Anónimo dijo...

(Miriam)
Te aclaro los comentarios: tanto el Trasnocho, como el Aurus, son vinos superfamosos, como las chaquetas de Armani, y también de precios astronómicos, que por recomendación de hasta el "dios Parker", tenian que ser gloriosos, y yo , la 1º vez que los tomé, me parecieron de espanto, y que sus bodegas se les habia ido totalmente la pinza¡
pero con más práctica, y más charla con enólogos, entendí el concepto, y aunque salen bebes al mercado, comprendo su proyección, y valoro su amplisima y compleja nariz, y muchas virtudes en cantidades industriales que antes, me asustaban porque tienen de todo, pero en todos los registros y en plan apabullante, por eso "manejar con cuidado", y tomar con muchas horas vista, es su razón de ser...

Y delos vinos mallorquines, salvo a 2 colegas catalanes, en Madrid a todo el mundo le parecen flojísimos.
El problema podria ir,de que con Macia Batle, hay que ir como si vieras en movimiento a Lauren Bacall (la chica de Humprhy en los 50 )y estamos más acostumbrados a Penélope Cruz, en "Jamón Jamón".con los Riberas, y los tintos de Alta expresión
Creo que con la explicación gráfica me has captado.. besos, majo (Miriam)

José Luis Giménez dijo...

Miriam, has conseguido con ese ejemplo que incluso yo lo entienda ;)
Es curioso eso de los vinos flojos. Bebimos ayer un "flojeras" Monte Real '70 que era pa'verlo :)))

Sotes.

Jose